CUANDO DUELE EL ALMA

MUCHÍSIMAS VECES HE ESCUCHADO ESO DE QUE DESPUÉS DE LA TEMPESTAD, SIEMPRE LLEGA LA CALMA, PERO HOY, JUSTO CUANDO PENSÉ QUE MI TORMENTA HABÍA PASADO, CUANDO PUDE ASOMARME A MI INTERIOR Y CREÍ QUE TODO ESTABA TRANQUILO, JUSTO CUANTO PENSÉ QUE HABÍA ENCONTRADO MI CALMA, RESULTÓ SER QUE SOLO ERA EL OJO DEL HURACÁN.

Cuando las emociones están mal ocurre que en lugar de ver un rayo de sol al amanecer, uno solo ve más y más nubes que enturbian la vista, que hacen que todo se vea oscuro, gris, triste, tratas de mover esas nubes, tratas, según tú de alejarlas, para seguir con tu vida “normal” con tu vida “feliz”, pero resulta que cada nube, cada viento frío es provocado por las lágrimas de tu interior, o sea, tú mismo estas propiciando tu frío y hostil contexto, pero aunque lo intentas, no puedes evitarlo, simplemente te sobrepasa.

HOY ES UNO DE ESOS DÍAS PARA MÍ, ESOS DÍAS EN QUE RESPIRAR TE DUELE, Y EL ALMA TE PESA, esos días en que fácilmente podrías tener una nubecita lloviéndote encima todo el tiempo, aun así traté de levantar la cabeza para continuar, pero al hacerlo me di cuenta que estaba empapado en llanto, de nuevo el recuerdo de mi pasado “perfecto” me persigue, de nuevo me tocó recordar todos esos amores perfectos que al final no lo fueron tanto.

Una tormenta de bellos recuerdos que siempre terminan convertidos en llanto, comienzas a meditar sobre el futuro que habías soñado, comienzas a desmontar, las promesas que quedaron sin cumplir, y aquí viene otro dicho falso, eso que dicen que el tiempo lo cura todo, hoy tampoco me sirve, pues ya hace tiempo que paso pero hoy el alma me vuelve a doler.

Sin embargo para dar sensación de normalidad, uno sigue con su rutina diaria, y cada persona que te conoce trata de hacerte sonreír y haces una mueca torcida para que no se sientan mal por su fallido intento, pero no puedes esbozar una sonrisa aunque lo intentes, hoy es uno de esos días que ni mil palabras por segundo podrían hacerte sentir mejor, a veces quisieras decir que solo te abrazaran, pero no lo dices, pues temes romper en llanto incontenible y aunque de buena fe tratan de hacerte sentir bien, tu solo quieres ese abrazo, el abrazo de tus seres queridos, es el único que hoy puede juntar todos tus pedacitos y reconstruirte el alma dolorida que estas cargando.

El peor sabor del día es que debes seguir con tu vida, como si nada pasara, como si tu sonrisa fuera sincera, debes seguir tu día con la melancolía rasgándote las entrañas, con el monstruo del recuerdo de lo sucedido, alimentándose de cada lágrima que te tragas, pues estas harto de que no comprendan que estas hecho pedazos, y que no quieres ir por la vida explicándole a todo el mundo lo que se siente cuando te duele el alma.

Y así libras el día, se acaba tu interminable jornada, solo para darte cuenta que al caer el sol, el alma pesa más, y que será una larga noche en donde tendrás que exprimir tus sentimientos para dejarlos en tu almohada en forma de lágrimas, lo malo, no dormirás nada, lo bueno, sabes que no es un estado recurrente de ánimo simplemente te invadió hoy la melancolía pero mañana estarás bien.

Esa noche te darás cuenta de lo que perdiste, que no fue tu culpa, ni de ellos, simplemente es la suma de varios mal entendidos, te darás cuenta que hiciste todo lo que estuvo en tus manos para salvar la situación, pero no se puede mendigar el amor, y mucho menos obligar a alguien para que siga a tu lado, no sabrás el por qué las cosas pasaron así, y por qué ahora cuando más los necesitas no están, pero también sabrás que lo que se va, deja espacio para que algo mejor entre, así que te reconfortarás en tu propia melancolía y reconstruirás tu alma, harás que deje de dolerte, porque uno es capaz de eso y más. 

Es válido y hasta recomendable, soltar lágrimas hasta inundar la almohada, pues el dolor del alma no es cualquier cosa, y es la única forma que conozco de poco a poco disminuir el dolor que produce un corazón roto.

ESTOY CONVENCIDO DE QUE ES LA ÚNICA FORMA DE PREPARARNOS PARA LA SIGUIENTE VEZ QUE NOS DUELA EL ALMA, ES LA ÚNICA FORMA DE ABRIR LA PUERTA A LA ESPERANZA DE UN NUEVO Y MEJOR COMIENZO.