viernes, 21 de julio de 2017

¿QUIÉN SOMOS REALMENTE? (REFLEXIONES PARA EL FIN DE SEMANA)


“DESCUBRIR ESTA VERDAD DE QUIEN ERES NO SOLO ES POSIBLE, ES TU DERECHO DE NACIMIENTO”.

CUALQUIER PENSAMIENTO QUE HAYAS TENIDO SOBRE TI MISMO. GRANDE O PEQUEÑO, NO ES QUIEN ERES. ES SÓLO UN PENSAMIENTO. LA VERDAD DE QUIEN ERES, NO PUEDE SER "PENSADA", PORQUE ES LA FUENTE DE TODOS LOS PENSAMIENTOS.

La verdad de quien tú eres no puede ser nombrada o definida. Palabras como alma, luz, verdad, ser, conciencia inteligencia universal o divinidad, aunque sean capaces de evocar el éxtasis de la verdad, son insuficientes como descripción de la inmensidad de quien eres realmente. Independientemente de cómo te identificas: como niño, adolescente, una madre, un padre, una persona más adulta, una persona saludable, una persona enferma una persona que sufre o una persona iluminada.

SIEMPRE, DETRÁS DE TODO ESO, ESTÁ LA VERDAD DE TI MISMO. Ella no te es ajena. Ella está tan próxima, que no consigues creer que eres tú. No hay concepto para definir la verdad de quien eres, ignorante o iluminado inútil o grandioso La verdad de quien eres, es libre de todo eso.

Ya eres libre, y todo lo que bloquea la realización de esta libertad es tu apego a alguna idea sobre quien eres. Este pensamiento no impide que seas la verdad de quien eres. Tú ya eres eso. Te separa de la realización de quien eres realmente.

Te invito a dejar que tu atención se sumerja en aquello que siempre ha estado ahí, esperando abiertamente para tú propia auto-realización, auto-comprensión y auto-conocimiento.

¿QUIÉN ERES REALMENTE? ¿Eres alguna imagen que aparece en tu mente? ¿Eres alguna sensación que aparece en tu cuerpo? ¿Eres tú alguna emoción que pasa por tu mente o cuerpo? ¿Eres algo que alguien dice que tú eres? ¿O eres una rebeldía contra algo que alguien ha dicho que eres? Estos son algunos de los muchos errores de identificación, que solemos cometer.

Todas estas definiciones van y vienen, nacen y después mueren. La verdad de lo que eres, no viene y va. Ella está presente antes del nacimiento, durante toda la vida y después de la muerte.

DESCUBRIR LA VERDAD ACERCA DE QUIÉN ERES, NO SOLO ES POSIBLE, ES TU DERECHO DESDE EL NACIMIENTO. Cualquier pensamiento de que este descubrimiento no es para ti, que aún no es tiempo, que no eres digno, que no estás listo, que tú ya sabes quién eres, son apenas trucos de la mente. Es hora de investigar este pensamiento y ver qué validez realmente tiene. En esta investigación existe una apertura para que la conciencia inteligente que eres, finalmente se reconozca a sí misma.

LA PREGUNTA MÁS IMPORTANTE QUE PUEDES HACERTE ES:

¿QUIÉN SOY YO? EN CIERTA FORMA, ESTA HA SIDO UNA CUESTIÓN IMPLÍCITA, CUESTIONADA EN CADA ETAPA DE TU VIDA.

Toda actividad, sea individual o colectiva, esta motivada en esencia por una búsqueda de auto-definición Normalmente, buscas una respuesta positiva a esta pregunta y huyes de una respuesta negativa. Cuando este cuestionamiento se vuelve explícito, el impulso y la energía de la pregunta orientan a la búsqueda de la verdadera respuesta, que es abierta, viva y llena de matices cada vez más profundos.

Tú ya experimentaste tanto el éxito como el fracaso. DESPUÉS DE UN CIERTO TIEMPO, TARDE O TEMPRANO, PODRÁS PERCIBIR QUIEN ERES, INDEPENDIENTEMENTE DE QUE LA DEFINICIÓN NO SEA SATISFACTORIA. Si esta pregunta no fuera verdaderamente contestada, sino apenas convencionalmente respondida, vas a continuar con hambre de saber. Porque independientemente de cómo tú estés definido por los otros, bien intencionados o no, e independientemente de cómo tú estés definido por ti mismo, ninguna definición puede traer certidumbre duradera.

EL MOMENTO EN QUE SE RECONOCE QUE NINGUNA RESPUESTA JAMÁS VA A SATISFACER ESTA PREGUNTA, ES CRUCIAL. A MENUDO SE LE DENOMINA COMO EL MOMENTO DE MADUREZ ESPIRITUAL, ES EL MOMENTO DE MADUREZ DE LA VIDA ESPIRITUAL.

En este punto, tú puedes conscientemente investigar quien realmente eres. En su poder y en su simplicidad la pregunta “¿Quién soy yo?" lanza la mente de nuevo a la raíz de la identificación personal, la hipótesis básica: yo soy alguien. En vez de automáticamente aceptar esta suposición como la verdad, puedes investigar más. No es difícil ver que este pensamiento inicial "yo soy alguien", conduce a todo tipo de estrategias: ser alguien mejor, alguien más protegido, alguien con más placer, más confortable y más realizado. Pero cuando este pensamiento muy básico es cuestionado, la mente encuentra el yo, que se separa de lo que ella estaba buscando. ESTO SE LLAMA AUTO-INVESTIGACIÓN.

La pregunta más básica: "¿Quién soy yo?" es la más olvidada. Pasamos la mayor parte de nuestros días diciéndonos a nosotros mismos o a los demás que somos alguien importante, alguien sin importancia, alguien grande, alguien pequeño, alguien joven o alguien viejo, sin nunca realmente cuestionar esta suposición tan básica: ¿Quién eres realmente? ¿Cómo sabes que esto es quien eres en realidad? ¿Es verdad realmente? Cuando centras tu atención en esta cuestión: "¿Quién soy yo?" tal vez veas una entidad que tiene tu cara y tu cuerpo ¿Pero quién es realmente consciente de esta entidad?

¿Eres el objeto, o la percepción del objeto? El objeto va y viene. El padre, el niño, el amante, el abandonado, el iluminado, el victorioso, o el derrotado. Todas esas identificaciones vienen y van La percepción de esas identificaciones están siempre presentes.

La identificación errada de uno mismo lleva al extremo placer o extremo dolor y a ciclos interminables de sufrimiento.

Cuando estás dispuesto a terminar con la identificación equivocada y descubrir directa y completamente que tú eres la propia conciencia y no estas definiciones impermanentes, la búsqueda de ti mismo en la mente, en los pensamientos, termina. Cuando la pregunta "¿quién?" es perseguida de forma inocente, pura, en todo el camino de vuelta a su origen, surge un gran descubrimiento: no hay absolutamente ninguna entidad allí. Apenas el indefinible e ilimitado reconocimiento de sí mismo como inseparable de cualquier otra cosa. Eres libre Estás completo, eres infinito. No hay final para ti, no hay límite.

CUALQUIER IDEA SOBRE TI MISMO QUE APAREZCA DESAPARECERÁ DE VUELTA EN TI. ERES LA PERCEPCIÓN. Y LA PERCEPCIÓN ES LA CONCIENCIA DEJA TODAS LAS AUTO-DEFINICIONES MORIR EN ESE MOMENTO. DÉJALAS IR, Y OBSERVA LO QUE QUEDA. VE LO QUE NUNCA HA NACIDO Y LO QUE NO MUERE. SIENTE EL ALIVIO DE DESHACERTE DE LA CARGA DE DEFINIRTE A TI MISMO. EXPERIMENTA LA EFECTIVA NO-REALIDAD DE LA CARGA EXPERIMENTA LA ALEGRÍA QUE ESTÁ AQUÍ DESCANSA EN LA PAZ INFINITA DE TU VERDADERA NATURALEZA ANTES DE QUE CUALQUIER PENSAMIENTO DE "YO" SURJA.


No hay comentarios:

Publicar un comentario