SIEMPRE ES
PRECISO SABER CUÁNDO SE ACABA UNA ETAPA DE LA VIDA. SI SE INSISTE EN PERMANECER
EN ELLA, MÁS ALLÁ DEL TIEMPO NECESARIO, SE PIERDE LA ALEGRÍA Y EL SENTIDO DEL
RESTO.
PASANDO PÁGINA, O CERRANDO PUERTAS, O CERRANDO CAPÍTULOS COMO QUIERA
QUE LO LLAMEMOS, LO IMPORTANTE ES PODER CERRARLOS, DEJAR IR MOMENTOS DE LA VIDA
QUE SE VAN CLAUSURANDO.
Es un
problema ortográfico, al ser humano en general le cuesta ser consciente de cuándo
debe poner “EL PUNTO FINAL”
¿Terminó
con su trabajo?, ¿Se acabó la relación?, ¿Ya no vive más en esa casa?, ¿Debe
irse de viaje?, ¿La amistad se acabó?
Puede
pasarse mucho tiempo de su presente "revolcándose" en los porqués, en
recordar una y otra vez en tratar de entender por qué sucedió tal o cual hecho.
El
desgaste va a ser infinito porque en la vida, usted, yo, su amigo, sus hijos,
sus hermanos, todos y todas estamos abocados a ir cerrando capítulos, a pasar
la hoja, a terminar con etapas, o con momentos de la vida y seguir adelante.
NO
PODEMOS ESTAR EN EL PRESENTE AÑORANDO EL PASADO. Ni siquiera preguntándonos por
qué. Lo que sucedió, sucedió, y hay que soltar, hay que desprenderse.
No
podemos ser niños eternos, ni adolescentes tardíos, ni empleados de empresas
inexistentes, ni tener vínculos con quien no quiere estar vinculado a nosotros.
DEBEMOS
TOMAR CONCIENCIA DE QUE LOS HECHOS PASAN Y HAY QUE DEJARLOS IR
Por
eso a veces es tan importante destruir recuerdos, regalar presentes, cambiar de
casa, papeles por romper, documentos por tirar, libros por vender o regalar.
Los cambios externos pueden simbolizar procesos interiores de superación.
Dejar
ir, soltar, desprenderse. En la vida nadie juega con las cartas marcadas, y hay
que aprender a cometer errores y tener aciertos. Hay que dejar ir, hay que
pasar la hoja, hay que vivir sólo lo que tenemos en el presente. El pasado ya
pasó.
No
espere que le devuelvan, no espere que le reconozcan, no espere que alguna vez
se den cuenta de quién es usted. Suelte el resentimiento, al encender "su televisor
personal" al darle vueltas y vueltas al asunto, lo único que consigue es
dañarse mentalmente, envenenarse, amargarse.
LA
VIDA SE VIVE HACIA ADELANTE, NUNCA HACIA ATRÁS.
Porque
si usted anda por la vida dejando "puertas abiertas", por si acaso,
nunca podrá desprenderse ni vivir lo de hoy con satisfacción. Noviazgos o
amistades que no se clausuran, posibilidades de "regresar" (¿a qué?),
necesidad de aclaraciones, palabras que no se dijeron, silencios que lo invadieron
…… Si puede enfrentarlos ya y ahora, hágalo por su salud emocional, si no,
déjelo ir, cierre capítulos.
Dígase
a usted mismo que no, que no vuelve. Pero no por orgullo ni soberbia, sino
porque usted ya no encaja allí, en ese lugar, en ese corazón, en esa
habitación, en esa casa, en ese escritorio, en ese oficio. Usted ya no es el
mismo que fue, hace dos días, hace tres meses, hace un año, por lo tanto, no
hay nada por que volver. Cierre la puerta, pase la hoja, cierre el capítulo y
comience otro.
NI USTED
SERÁ EL MISMO, NI EL ENTORNO AL QUE REGRESA SERÁ IGUAL, PORQUE EN LA VIDA NADA
SE QUEDA QUIETO, NADA ES ESTÁTICO. ES SALUD MENTAL, AMOR POR USTED MISMO ES
DESPRENDER LO QUE YA NO ESTÁ EN SU VIDA.
Recuerde
que nada ni nadie es indispensable. Ni una persona, ni un lugar, ni un trabajo,
nada es vital para vivir porque: cuando usted vino a este mundo 'llegó' sin esa
etiqueta, por lo tanto, es "costumbre" vivir pegado a él, y es un
trabajo personal aprender a vivir sin él, sin el adhesivo humano o físico que
hoy le duele dejar ir.
ES
UN PROCESO DE APRENDER A DESPRENDERSE Y, HUMANAMENTE SE PUEDE LOGRAR PORQUE, LE
REPITO, NADA NI NADIE NOS ES INDISPENSABLE. SÓLO ES COSTUMBRE, APEGO,
COMODIDAD, MIEDO, DEPENDENCIA, NECESIDAD.
PERO
... CIERRE, CLAUSURE, LIMPIE, TIRE, OXIGENE, DESPRÉNDASE, SACUDA, SUELTE…………………
LUEGO RESPIRE HONDO Y DEJE QUE LA FELICIDAD LE INVADA.
HAY
TANTAS PALABRAS PARA SIGNIFICAR SALUD MENTAL QUE CUALQUIERA QUE SEA LA QUE
ESCOJA, LE AYUDARÁ DEFINITIVAMENTE A SEGUIR PARA ADELANTE CON TRANQUILIDAD
LLENO DE ARMONÍA Y PAZ INTERIOR.
LA VIDA TIENE UN RITMO
NATURAL, E INTENTAR DETENERLO O DESVIARLO A VECES ES INÚTIL. EN ESTE PROCESO,
SE PIERDE MUCHA ENERGÍA, ENTUSIASMO Y DEDICACIÓN QUE BIEN PODRÍA PONERSE EN
OTRAS COSAS.
A veces no hacer nada es lo
mejor que puedes hacer. En tiempos frenéticos donde los procesos se aceleran o
ralentizan al límite, el no esfuerzo es lo más conducente.
LA
PRÁCTICA DE LA NO INTERVENCIÓNen
el curso de las cosas es un desafío para aquellos seres inquietos. La cultura,
las ciudades y el diseño de las experiencias conforman un entramado social que
empuja hacia el movimiento.
Entonces, es posible que se
fuerce la llegada de cierto estado de caos, confusión, desorden de cualquier
tipo, y a tomar decisiones forzadas.
¿QUÉ PASARÍA SI APLICAMOS EL
PRINCIPIO DE NO INTERVENCIÓN, Y DEJAMOS QUE LAS COSAS SE CALMEN?
ACCIÓN/REACCIÓN, Y LA OPCIÓN
DE NO INTERVENCIÓN
El principio de
acción/reacción es conocido por todos: a cualquier hecho, circunstancia,
opinión o estímulo, le oponemos otro, el de la reacción, generado desde las
emociones, que son el gran motor a partir del que nos movilizamos. Desde allí
se quiere obtener un resultado que vaya lo más en concordancia posible con lo
que se anhela o se piensa.
Sin embargo, quizás hayas
tenido la experiencia práctica de la no intervención. Se trata de una elección
consciente de no seguir forzando el curso de las cosas, o el resultado de lo
que te gustaría obtener, para dejar fluir el devenir natural de los
acontecimientos.
Este estado de fluir no
tiene que ver con quedarse estancado, e incluso, poder retomar la marcha; sino
que te coloca en un estado de observación neutral, no forzado, sencillo y de
humilde expectación ante las cosas. La clave es en tranquilizar las emociones y
la mente, para no convertirlas en un motor en piloto automático -como suelen
vivir la mayor parte del tiempo-
Un ejemplo cotidiano: tienes
un pequeño tropiezo en la calle, te tuerces un poco el tobillo; se te hincha, y
el médico indica dos días de reposo, hielo y… esperar. Ya sabes lo que
sucedería si, así y todo, vuelves a la acción cotidiana. Entonces, eliges
seguir aquella recomendación, serenarte y aprovechar ese tiempo para estar
contigo. Descansar, leer, evitar movimientos fuertes. Eso es la no intervención.
5 PREGUNTAS Y RESPUESTAS
PARA CONOCER MÁS LA PRÁCTICA DE LA NO INTERVENCIÓN
1.- ¿NO INTERVENIR SIGNIFICA
DEJAR DE LADO EL TIMÓN DE LA VIDA?
Para nada: la inacción
momentánea es otra forma de actuar. En la acción/reacción cotidiana hay a veces
un gran esfuerzo de tu parte “para hacer que las cosas sucedan”. En este caso,
la propuesta es menos agresiva; te desapegas del afán de querer controlar las
cosas y aprendes sobre la paciencia y la confianza en que lo que es para ti,
llegará a su tiempo.
2.- ¿LA NO INTERVENCIÓN
TIENE QUE VER CON UN PRINCIPIO FILOSÓFICO MAYOR?
Sí. Hay una frase del Tao
que dice: “CUANDO DEJO IR LO QUE SOY, ME CONVIERTO EN LO QUE PUEDO SER.
CUANDO DEJO IR LO QUE TENGO, ATRAIGO LO QUE NECESITO”.
Esta postura ante las cosas
de la vida incluye una gran dosis de sabiduría interior, ya que permite que el
curso de las cosas siga en forma natural, y no forzada.
3.- EN CONCRETO, ¿QUÉ ES LO
QUE ESTOY “HACIENDO” CUANDO “NO ESTOY HACIENDO”?
El estado de no intervención
te coloca en una posición de entendimiento pleno. Tu intervención no es
necesaria en términos de tomar una acción concreta, o influir en el resultado a
través de tu hacer.
Lo único que necesitas es
seguir siendo tu; silenciarte, tranquilizarte, confiar y proyectar el mejor
estado interno que contribuya al proceso en marcha. La depresión y tristeza
-por el pasado de esa situación-, y la ansiedad -por el futuro-, dejarán lugar
a una mayor paz interior.
4.- ¿PUEDE SER QUE ME SIENTA
INCÓMODO AL INCORPORARLO A LA VIDA COTIDIANA?
Sí, es incómodo durante un
tiempo, ya que toda la vida quizás te has pasado resolviendo cosas y queriendo
que salgan a tu manera. Esa manera poco confortable de vivir se traduce en
mayor tensión, obnubila tu pensamiento crítico, no permite que analices las
mejores alternativas y te vuelves un poco hostil contigo y con los demás.
Puedes sentirte raro. Lo
mejor es silenciarte, serenarte y entregarte al proceso, colocando tus
pensamientos y la energía de la no intervención a favor del proceso natural, sea
lo que traiga el resultado de las situaciones.
5.- ¿CÓMO PUEDO ATRAVESAR
MEJOR EL MOMENTO DE NO INTERVENCIÓN?
Relejarte de todas las
formas posibles; meditar; hacer yoga; caminar en la naturaleza; observar las
nubes; quedarte en silencio en varios momentos del día; dejar que tus
pensamientos controladores sigan su camino y evitar detenerte en ellos
(“engancharte en el teatro de la mente”), son herramientas esenciales del
proceso. En la práctica continuada, aprenderás a serenarte, a confiar, a tener compasión
hacia ti y hacia todos los involucrados en el curso de las cosas, y a dar la
bienvenida a lo que ocurra con mejor disposición.
EN DEFINITIVA, ES INCORPORAR
LA ACTITUD DE NO INTERVENIR PERMANENTEMENTE EN TODAS Y CADA UNA DE LAS COSAS,
SIN QUE ESTO SIGNIFIQUE ABANDONARTE A TU SUERTE O DEJAR PASAR LAS
OPORTUNIDADES.
MÁS BIEN ES ESTAR MEJOR
PREPARADO INTERIORMENTE Y TENER MAYOR LUCIDEZ PARA ESCOGER AQUELLA EXPERIENCIA
QUE ES PRODUCTO DEL DEVENIR NATURAL DE LA VIDA.
CUANDO ALCANZAS ESTE ESTADO
INTERNO, VERÁS, VIVIRÁS Y SENTIRÁS LA EXPERIENCIA DE QUE TODO FLUYE A SU
TIEMPO; QUE NO SE NOS DA NADA QUE NO PODAMOS MANEJAR, Y QUE TODO OCURRE POR
ALGÚN MOTIVO MAYOR AL QUE PODAMOS ENTENDER CON LA MENTE.
UNA
SELECCIÓN DE REFLEXIONES Y AFORISMOS DE ESTE FAMOSO ESCRITOR Y PSICÓLOGO
CLÍNICO.
EN ESTA
SELECCIÓN DE FRASES DE WALTER RISO ENCONTRARÁS REFLEXIONES SOBRE TEMAS
COMO EL AMOR, LA DEPENDENCIA EMOCIONAL, EL OPTIMISMO, EL PESIMISMO Y LA
LUCHA POR SUPERAR SITUACIONES Y SUPERARTE A TI MISMO
Walter
Riso es un conocido escritor famoso por sus numerosas publicaciones en el
ámbito de la autoayuda y el crecimiento personal. Psicólogo especializado en
terapia cognitivo-conductual y en bioética con formación en teatro y filosofía,
este autor pretende promover la salud física y mental mediante la
autorreflexión y el afrontamiento realista de las situaciones.
22. QUE
HOY SEA TU DÍA. SECUÉSTRALO PARA TI. QUE CADA COSA QUE HAGAS SEA PARA SENTIRTE
BIEN: PROHIBIDO SUFRIR POR TONTERÍAS.
Esta
frase nos empuja a vivir y a luchar por ser feliz, obviando aquellas cosas que
nos hagan sufrir sin motivo.
23. HAY
VECES EN QUE EL TEMOR TE ABRE LOS OJOS, PERO CASI SIEMPRE TE LOS CIERRA
Vivir
siempre temiendo algo hace que nos centremos en ese algo y obviemos otros
elementos y posibilidades, limitándonos la vida.
26.
SOMETERTE AL QUÉ DIRÁN ES UNA FORMA DE ESCLAVITUD SOCIALMENTE ACEPTADA
Tenemos
que vivir nuestra vida de forma coherente con lo que pensamos y sentimos,
independientemente de lo que piense el resto del mundo.
27. LA
VERDAD NO SE PROCLAMA NI SE DECRETA; MÁS BIEN SE DESCUBRE, SE BUSCA
Decir
que algo es verdad no lo convierte en tal. La verdad es aquello que
perseguimos, y que ocasionalmente encontramos. De hecho, la verdad puede variar
de persona a persona, con el tiempo y según la situación.
28.
OPTA SIEMPRE POR LA LIBERTAD DE CONCIENCIA: PIENSA, SIENTE Y OPINA EN LO QUE
SIGNIFIQUE ALGO PARA TI
Debemos
ser auténticos y fieles a nosotros mismos: pensemos y involucrémonos en lo que
de verdad nos importe, en lo que sea significativo para nosotros.
29.
AMAR NO ES PERDER LA INDIVIDUALIDAD NI TORCER LA VISIÓN DEL MUNDO, ES
REAFIRMARSE JUNTO AL OTRO, CRECER DE A DOS, SIENDO DISTINTOS Y ÚNICOS
El amor
no hace que seamos un mismo ser, sino que siendo cada uno una persona
independiente pueda crecer y desarrollarse junto al otro.
30. LAS
MEJORES COSAS EN LA VIDA SUELEN OCURRIR CUANDO NO ESPERAMOS NADA
A veces
buscamos algo una y otra vez con desesperación, sin conseguirlo. Generalmente
es cuando no buscamos algo cuando más fácilmente lo encontramos.
31. VER
EL MUNDO EN BLANCO Y NEGRO NOS ALEJA DE LA MODERACIÓN Y DE LA PAZ INTERIOR
PORQUE LA VIDA, SE MIRE POR DONDE SE MIRE, ESTÁ COMPUESTA DE MATICES
Las
cosas no son de una manera u otra. Siempre va a depender del punto de vista que
tomemos respecto a las cosas.
32. EL
VALIENTE NO ES AQUEL QUE NO SIENTE MIEDO, SINO EL QUE LO ENFRENTA DIGNAMENTE,
ASÍ LE TIEMBLEN LAS RODILLAS Y EL CEREBRO
No es
malo tener miedo, pero sí quedarse paralizado por él. Vencer el miedo no
significa no tenerlo, sino que éste no te limite.
33.
QUIERO QUE ME ACEPTES Y NO QUE ME “APRUEBES”. ÁMAME SIN EXÁMENES DE ADMISIÓN:
AMAR NO ES JUZGAR
Las
personas que se aman, aman tanto lo bueno como lo malo del otro sin por ello
juzgarle. No se trata de decir si tiene suficientes cualidades para quererle o
no, simplemente se quiere.
34. LA
NOVEDAD PRODUCE DOS EMOCIONES ENCONTRADAS: MIEDO Y CURIOSIDAD.
Mientras
el miedo a lo desconocido actúa como un freno, la curiosidad obra como un
incentivo (a veces irrefrenable) que nos lleva a explorar el mundo y a
asombrarnos
Lo
desconocido nos puede dar miedo, pero si lo exploramos podemos descubrir nuevas
cosas que nos apasionen y llenen nuestras vidas de experiencias y nuevas
perspectivas.
35. NO
PUEDES ANDAR POR LA VIDA PIDIENDO PERMISO PARA VIVIR O SENTIR
Lo que
sentimos o pensamos es algo que nos pertenece y que nadie más que nosotros
debemos decidir. Nadie debe juzgarlo, ni debe depender de lo que los demás
piensen de ello.
36. LA
MENTE DE PIEDRA NO SE PERMITE DUDAR Y ABORRECE LA AUTOCRÍTICA. SUS FUNDAMENTOS
SON INMODIFICABLES E INDISCUTIBLES
La
inflexibilidad nos conduce a una mentalidad encorsetada en una perspectiva
limitada que no permite apreciar otros puntos de vista ni aprender.
37. DE
NADA SIRVE QUE TE ENDULCEN LOS OÍDOS SI TE AMARGAN LA VIDA
Aunque
los elogios y las palabras pueden ser agradables, son los actos y lo que nos
hacen sentir las personas lo que debe determinar nuestra actitud ante ellos.
38.
ERES LO QUE HACES Y LO QUE PIENSAS. LAS DOS COSAS. Y SI NO SON COMPATIBLES, NO
ERES CREÍBLE
Una persona
que no actúa como piensa no resulta creíble, ya que o bien no se atreve a
llevar a cabo sus pensamientos o finge pensar una cosa con algún propósito (sea
este interesado o simplemente dar una imagen concreta).
39. LA
FIDELIDAD A TU PAREJA NO ES AUSENCIA DE DESEO POR OTROS. AL VER A ALGUIEN QUE
TE GUSTE, ES CUESTIÓN DE AUTOCONTROL Y EVITACIÓN A TIEMPO.
Recomiendo
no jugar con fuego ni hacerte el idiota, porque te puedes quemar
Ser
fiel no implica no desear ni sentirse atraído por otras personas, sino
controlar dicha atracción en favor de no perder a la persona amada y lo que
tenemos con ella.
40. LA
INFIDELIDAD NO ES UNA DECISIÓN QUE SE TOMA, PERO SI QUIERES SER INFIEL TÚ
DECIDES ENFRENTAR LOS COSTOS DE LAS CONSECUENCIAS
Quien
es infiel debe estar dispuesto a aceptar las consecuencias de su acción.
41.
CUANDO EL CORAZÓN Y LA MENTE MARCHAN UNIDOS, TENDRÁS LA FORTALEZA DE UN ROBLE Y
LA DELICADEZA DE UNA GACELA
Que las
emociones y los pensamientos estén de acuerdo provocan que nazca una gran
fuerza respecto al tema sobre el que coinciden. Es lo que nos hace apasionarnos
con algo, motivarnos y desarrollarnos plenamente.
42. LA
FELICIDAD NO ES UNA ESTACIÓN A LA CUAL LLEGAR, SINO UNA MANERA DE VIAJAR POR LA
VIDA
La
felicidad no es algo que deba buscarse por sí misma. No se trata de un objetivo
en sí, sino el producto de recorrer el camino que deseamos recorrer en nuestra
vida.
43. UN
CLAVO NO SIEMPRE SACA A OTRO CLAVO, A VECES LOS DOS SE QUEDAN DENTRO
Saltar
de una relación a otra no va a hacer que se nos olvide automáticamente la
anterior, a pesar de la creencia popular.
44.
TIENES DERECHO A CAMBIAR DE OPINIÓN
Debemos
ser flexibles y tener en cuenta que no es malo que nuestra opinión sobre algo
pueda cambiar.
NADIE PIERDE POR DAR AMOR,
PORQUE OFRECERLO CON SINCERIDAD, CON PASIÓN Y DELICADO AFECTO NOS DIGNIFICA
COMO PERSONAS. EN CAMBIO, QUIEN NO SABE RECIBIRLO NI CUIDAR ESE INMENSO REGALO ES
QUIEN PIERDE DE VERDAD. POR ELLO RECUERDA, NUNCA TE ARREPIENTAS DE HABER
AMADO Y HABER PERDIDO, PORQUE LO PEOR ES NO SABER AMAR.
Afortunadamente la neurociencia
va ofreciéndonos día tras día reveladoras informaciones que nos explican por
qué actuamos como actuamos en esto del amor. Lo primero que conviene recordar
es que EL CEREBRO HUMANO NO ESTÁ PREPARADO PARA LA PÉRDIDA, nos supera,
nos inmoviliza y nos enclaustra durante un tiempo en el palacio del sufrimiento.
“El amor no tiene cura, pero
es la cura de todos los males” -Leonard Cohen-
ESTAMOS PROGRAMADOS
GENÉTICAMENTE PARA CONECTAR ENTRE NOSOTROS Y PARA CONSTRUIR LAZOS EMOCIONALEScon
los que sentirnos seguros, con los que edificar un proyecto. Es así como hemos
sobrevivido como especie, “conectando”, de ahí que una pérdida, una separación
e incluso un simple malentendido haga que salte al instante la señal de alarma
en nuestro cerebro.
Ahora bien, otro aspecto
complejo sobre el tema de las relaciones afectivas es el modo en el que
afrontamos dicha separación, dicha ruptura. Desde un punto neurológico
cabe decir que empiezan a liberarse al instante las hormonas del
estrés, conformando en muchos casos lo que se conoce como “el corazón roto
“. Sin embargo, desde un punto emocional y psicológico, lo que sienten muchas
personas es otro tipo de realidad.
No solo experimentan el
dolor por la falta del ser amado. Sienten una pérdida de energía, de aliento vital. Es
como si todo el amor dado, todas las esperanzas y afectos dedicados a esa
persona se hubieran ido también, dejándolos vacíos, yermos, marchitos…
Entonces… ¿Cómo volver a
amar de nuevo si lo único que habita en nuestro interior es el resto de un mal
recuerdo? Es necesario que afrontemos estos momentos de otro modo.
¿QUÉ PODEMOS HACER DAR AMOR
O EVITAR AMAR DE NUEVO?
Todos nosotros somos un
delicado y caótico compendio de historias pasadas, de emociones vividas, de
amarguras soterradas y miedos camuflados. Cuando se inicia una nueva
relación nadie lo hace enviando previamente todas sus experiencias pasadas a la
papelera de reciclaje. Nadie empieza de “0”. Todo está ahí, y
el modo en que hayamos gestionado nuestro pasado hará que vivamos un presente
afectivo y emocional con mayor madurez, con mayor plenitud.
Ahora bien, el hecho de
haber vivido en piel propia una amarga traición o, sencillamente, percibir
que el amor se ha apagado en el corazón de nuestra pareja cambia mucho el modo
en que vemos las cosas. Dar amor con intensidad durante una época determinada,
para después quedarnos vacíos y enclaustrados en la habitación de los recuerdos
y las ilusiones perdidas, cambia muchas veces la arquitectura de nuestra
personalidad.
No falta quien se vuelve desconfiado,
e incluso quien desarrolla poco a poco la gélida y férrea coraza del
aislamiento donde interiorizar el clásico mantra de “mejor no amar para
no sufrir “. Sin embargo, es necesario derribar una idea básica en estos
procesos de lenta “autodestrucción”.
Nunca debemos arrepentirnos
de haber amado, de habernos arriesgado a un todo o nada por esa
persona. Son esos actos los que nos dignifican, los que nos hacen ser
humanos y maravillosos a la vez. VIVIR ES AMAR Y AMAR ES DAR SENTIDO A
NUESTRAS VIDAS A TRAVÉS DE TODAS LAS COSAS QUE HACEMOS: NUESTRO TRABAJO,
NUESTRAS AFICIONES, NUESTRAS RELACIONES PERSONALES Y AFECTIVAS…
Si renunciamos a amar o nos
arrepentimos por haberlo ofrecido, renunciamos también a la parte más hermosa
de nosotros mismos.
SANAR EL AMOR PERDIDO
Según un estudio llevado
a cabo en la University College London, existen ciertas
diferencias entre hombres y mujeres a la hora de afrontar una ruptura afectiva.
La respuesta emocional
parece ser muy distinta. Las mujeres sienten mucho más el impacto de la
separación, sin embargo, es común que se repongan antes que los hombres.
Ellos, por su parte, suelen
aparentar estar bien, se visten con la máscara de la fortaleza refugiándose en
sus ocupaciones y responsabilidades. Sin embargo, no siempre logran superar esa
ruptura o tardan años en hacerlo. ¿La razón? EL SEXO FEMENINO SUELE
DISPONER DE MEJORES HABILIDADES PARA GESTIONAR SU MUNDO EMOCIONAL. Facilitar el
desahogo, buscar apoyo y afrontar lo ocurrido desde una perspectiva donde se
halla el perdón y la actitud de pasar página suele hacer las cosas más fáciles.
Sea como sea, y más allá de
los géneros o del motivo que haya originado esa ruptura, quedan claras algunas
cosas que es necesario inocular en nuestro corazón a modo de vacuna.
Ningún fracaso emocional debe vetarnos nuestra oportunidad de ser felices de
nuevo.DIGAMOS “NO” A SER ESCLAVOS DEL PASADO Y ETERNOS
CAUTIVOS DEL SUFRIMIENTO.
OTRO ASPECTO QUE ES BUENO
RECORDAR ES QUE AMAR NO ES SINÓNIMO DE SUFRIR. NO ALIMENTEMOS ESPERANZAS O
ALARGUEMOS EL “FINAL” DE UNA RELACIÓN QUE DE ANTEMANO TIENE FECHA DE
CADUCIDAD.
UNA RETIRADA A TIEMPO SALVA
CORAZONES Y UN ADIÓS VALIENTE CIERRA UNA PUERTA PARA ABRIR OTRA, ESA DONDE
EL AMOR SE CONJUGA SIEMPRE CON LA PALABRA FELICIDAD.
SI NO CUIDAMOS NUESTROS
PENSAMIENTOS Y PROCESOS MENTALES, LA BIOQUÍMICA DE NUESTRO ORGANISMO
SENCILLAMENTE SEGUIRÁ UN PATRÓN EQUIVOCADO Y NOS INUNDARÁ DE TOXINAS QUE NO
JUEGAN A NUESTRO FAVOR, SINO QUE NOS DEBILITAN, PRIMERO EMOCIONALMENTE Y
DESPUÉS ORGÁNICAMENTE.
A menudo leemos en libros de
autoayuda o autoconocimiento que los pensamientos de carga negativa o
destructiva afectan a la salud y pueden crear enfermedades. Que cuidar
nuestros pensamientos puede tener una incidencia directa en nuestra salud, como
poco.
Este tipo de aseveraciones, así
tan resumidas (porque la industria editorial de hoy en día parece premiar los
libros comerciales y resumidos, frente a los detallados y más técnicos) son una
realidad. El problema es que no se explica el proceso por el cual el
pensamiento de las personas se convierte directamente en parte de su salud,
creando enfermedades y patologías o produciendo todo lo contrario: mejoría y
curaciones.
Son muchos y muchas los que han
preguntado el proceso que sigue un pensamiento hasta convertirse en enfermedad
así pues En el artículo de hoy tratare de hacer lo que muchos de esos
documentales y libros no hacen:EXPLICAR CÓMO FUNCIONA Y DE
QUÉ MANERA OPERA EL PROCESO BIOQUÍMICO COMPLETO POR EL CUAL NUESTROS
PENSAMIENTOS AFECTAN DIRECTAMENTE A NUESTRA SALUD TANTO PARA BIEN COMO
PARA MAL.
Porque creemos que todo lo que
se explica es fácilmente comprensible, mientras que lo que no se explica pasa a
formar parte de la creencia. O se cree o no… pero no se comprende.
VEAMOS, PUES, DE QUÉ MANERA UN
SIMPLE PENSAMIENTO (CADA PENSAMIENTO QUE TENEMOS) AFECTA, FÍSICA Y
MATERIALMENTE, A NUESTRO ORGANISMO.
El proceso es tan enriquecedor
como interesante, de manera que merece la pena conocerlo a fondo porque, así,
nos estaremos conociendo a nosotros mismos. Estaremos conociendo cómo opera
nuestra Máquina Perfecta: la Mente, y su extensión: el cuerpo.
EL PROCESO QUE SIGUE UN
PENSAMIENTO PARA CONVERTIRSE EN ENFERMEDAD O, TODO LO CONTRARIO:
El pensamiento es la actividad
de nuestro cerebro. Los pensamientos, las emociones, cómo nos sentimos, nuestra
personalidad, la forma en que respondemos a nuestra vida… Todo ello forma lo
que conocemos como “Mente” o actividad mental.PERO AHORA NOS INTERESA ANALIZAR EL PENSAMIENTO COMO EL FLUJO DE
ACTIVIDAD ELÉCTRICA QUE SE DESARROLLA EN NUESTRO CEREBRO, CONCRETAMENTE, LA
ACTIVIDAD COMUNICATIVA ENTRE LAS NEURONAS.
Esas conexiones eléctricas
interneuronales son las que dan lugar a lo que conocemos como pensamientos (ya
sean imágenes, sonidos, recuerdos y memorias, inspiraciones, ideas, etc.…).
Una vez el cerebro ha creado y
perseverado en una serie de pensamientos de un determinado tipo (alegres,
destructivos, de crítica, humorísticos, inspirativos…)NUESTRO HIPOTÁLAMO (EL
GRAN LABORATORIO QUÍMICO DE NUESTRO ORGANISMO) se pone en marcha. ¿Forma de
proceder? Tan simple de describir como complejo es en su funcionamiento: el
hipotálamo se pone a crear hormonas (péptidos) directamente vinculados a los
pensamientos que nuestro cerebro está teniendo. Es decir, que nuestro
hipotálamo creará combinaciones químicas de la misma tipología que los
pensamientos que nuestro cerebro está produciendo.
De este modo, aparecen las
“emociones”. Nuestro hipotálamo, al segregar e inundar el torrente sanguíneo
con esas hormonas vinculadas a nuestros pensamientos, hace que nuestro
cuerpo cree sensaciones. Por eso nos sentimos bien o mal, alegres o abatidos,
calmados o nerviosos, como respuesta a nuestros pensamientos. Se trata,
sencillamente, de que nuestro centro bioquímico (el hipotálamo) está creando
productos químicos como el más perfecto laboratorio imaginable, para “dar forma
de sensaciones” a los pensamientos que está produciendo nuestro cerebro.
Nuestro hipotálamo puede crear
péptidos que nos hagan actuar deprisa ante situaciones de estrés; o puede
segregar hormonas placenteras para adormecernos o para “premiarnos”.EN DEFINITIVA, PUEDE CREAR UNA SUSTANCIA QUÍMICA NATURAL PARA CADA
PROCESO MENTAL QUE ESTÉ EN ESE MOMENTO EN MARCHA.
EL PROBLEMA:
El problema es que, por
desconocimiento de estos procesos, la gente no es consciente de la importancia
que tiene “pensar correctamente”. Cuando decimos “pensamiento
correcto” queremos decir, ni más ni menos, que el que sea adecuado y
beneficioso para cada uno de nosotros. Ni más ni menos.
Como la mayoría de las personas
desconoce la maquinaria bioquímica que se pone en marca cada vez que nuestro
cerebro produce pensamientos de un tipo o de otro, la gente simplemente no
puede controlar cómo se siente, o lo que es mucho más importante, no puede
controlar el hecho de que muchas de esas sustancias químicas vinculadas a
pensamientos destructivos, están literalmente, envenenando su cuerpo a
diario y de ahí surgen enfermedades.
Pero vayamos por partes, ya que
hemos dicho que íbamos a explicar el proceso completo y de forma clara:
Si, por ejemplo, permitimos que
las tensiones de cada día nos mantengan en un estado de estrés, o de alerta y
desconfianza (actividades que realizará nuestro cerebro a través de los
pensamientos que crea y que no se controlan),NUESTRO HIPOTÁLAMO
RESPONDERÁ SEGREGANDO SUSTANCIAS QUÍMICAS QUE COLOCARÁN NUESTRO ORGANISMO
EN MODO “ATAQUE/HUIDA” que es la respuesta interna ante el peligro y, por
ello, frente a una situación de vida o muerte.
Esa actividad del hipotálamo
que es tan importante y decisiva en momentos puntuales de verdadero peligro, se
vuelve autodestructiva cuando se experimenta muy continuada y regularmente. El
estrés, la ansiedad, la prisa, la urgencia, la preocupación… hace que nuestro
cerebro cree situaciones inexistentes y, como respuesta química a ello, nuestro
hipotálamo segrega las hormonas correspondientes a un ataque o a una situación
de peligro inminente para nuestra vida… Y así, durante horas al día, y durante
días y días al año. Eso, simplemente, destroza nuestro cuerpo por intoxicación
bioquímica, dado que ningún organismo puede vivir permanentemente en estado de
shock, de peligro o de estrés/miedo continuado.
Esto es lo que da lugar a
infartos, anginas de pecho, úlceras gastrointestinales, hipertensión arterial,
diabetes y un largo etcétera de patologías que pueden llegar a ser mortales.
Y todo comienza… En nuestros
pensamientos descontrolados que han dado la orden equivocada a nuestro
hipotálamo para que produzca sustancias que, segregadas de manera continuada en
nuestro torrente sanguíneo, envenenan nuestro cuerpo.
PATOLOGÍAS CON ORIGEN EN LA
GESTIÓN DEL PENSAMIENTO:
Otro cúmulo de patologías y
enfermedades que nuestro cuerpo padece sin que fuera necesario y que están
directamente vinculadas a la forma en que pensamos son las infecciones
víricas y bacteriológicas.
El procedimiento es similar al
anterior, pero no idéntico: bajo situaciones constantes de estrés, miedo,
ansiedad y preocupación, como hemos explicado, nuestra actividad hormonal pone
en marcha procesos de defensa/respuesta. Es decir, tensiona músculos, prepara
el cuerpo para la potencial huida, redirige la circulación sanguínea, paraliza
procesos internos no vitales, para atender una supuesta amenaza que no
existe… pero que estamos imaginando.
¿QUÉ LOGRA TODO ESTO?… PUES NI
MÁS NI MENOS, QUE NUESTRO SISTEMA INMUNITARIO SE DESGASTE, SE COLAPSE Y NO
PUEDA REPELER ATAQUES QUE, EN SITUACIONES NORMALES, ESTÁ COMBATIENDO Y
RECHAZANDO A DIARIO (CUANDO FUNCIONA BIEN, CLARO ESTÁ).
Y TODO COMIENZA POR LA
ACTIVIDAD MENTAL.
Debemos tener en cuenta, ahora
que sabemos cómo opera la bioquímica de nuestro cerebro, que nuestros
pensamientos son las “instrucciones” que le dará nuestro cerebro a nuestro
hipotálamo para que éste cree las hormonas que correspondan a ese estado
mental. Si no cuidamos nuestros pensamientos y procesos mentales, la bioquímica
de nuestro organismo sencillamente seguirá un patrón equivocado y nos
inundará de toxinas que no juegan a nuestro favor, sino que nos debilitan,
primero emocionalmente y después orgánicamente.
Nuestros órganos dejan de
funcionar adecuadamente para hacerlo en modo “alerta”, si vivimos bajo
situaciones de estrés sostenido, prisa, preocupación y ansiedad. Con ello la
circulación sanguínea falla, la tensión se dispara, la actividad nerviosa salta
por los aires y aparecen las enfermedades en órganos como el corazón, los
riñones, el páncreas y un largo etcétera de variables.
Del mismo modo, esas
instrucciones incorrectas que no hemos sabido parar y revertir en nuestros
pensamientos afectan a nuestro sistema emocional: agotamiento, pena, rabia,
frustración, depresión, bipolarismo… y un largo etcétera de variables de orden
nervioso y emocional. Tan peligrosas o más que las orgánicas.
COMO SIEMPRE EL CONOCIMIENTO ES
LA SOLUCIÓN
Ahora que sabemos cómo se
origina el proceso (pensamiento – hipotálamo – hormonas – envenenamiento del
cuerpo – destrucción del sistema inmunitario) podemos también invertir el
proceso.
PENSAMIENTOS DE CONFIANZA,
AMOR, SEGURIDAD, TRANQUILIDAD, CALMA, PAZ, ALEGRÍA… INICIAN UNA SECUENCIA
TOTALMENTE DIFERENTE A LA QUE DA LUGAR A ENFERMEDADES.
En estos otros casos, nuestro
hipotálamo produce hormonas endorfinas, placenteras, de anestesia, calma,
tranquilidad etc.… Que contribuyen a que nuestro organismo pueda operar con
normalidad y no bajo amenazas.
Nuestro sistema inmunitario
puede hacer su trabajo de manera eficiente, el riego sanguíneo sigue el modelo
y ritmo óptimos, nuestros órganos operan bajo condiciones perfectas.
Y TODO COMIENZA CON EL
DETONANTE INICIAL: LOS PENSAMIENTOS: LA LLAVE A LA BIOQUÍMICA DEL CUERPO
HUMANO.
AHORA, YA SABES QUÉ HAY DETRÁS
DE CADA EMOCIÓN Y DE POR QUÉ TE SIENTES COMO TE SIENTES EN CADA MOMENTO.
AHORA TAMBIÉN SABES DE QUÉ
FORMA Y POR QUÉ PASOS, UN PENSAMIENTO SE CONVIERTE EN UNA TOXINA Y AFECTA
A TU ORGANISMO ENFERMÁNDOLO, O, TODO LO CONTRARIO: SANÁNDOLO.
Y, COMO SIEMPRE QUE APRENDES
ALGO NUEVO E IMPORTANTE, AHORA TÚ ERES EL DUEÑ@ DE HACER LOS CAMBIOS OPORTUNOS,
PORQUE ES TU CALIDAD DE VIDA Y TU SALUD LAS QUE ESTÁN EN JUEGO.
EL
CAMINO DE REGRESO A CASA ES UNA METÁFORA DIRIGIDA A
QUIENES HAN ATRAVESADO LAS PRIMERAS ETAPAS DE UN CRECIMIENTO IDEALIZADO, Y TRAS
ACEPTAR Y COMPRENDER MEJOR EL GRAN JUEGO DEL SER CONSCIENTES, NO
DESEAN SOMETERSE A FERVIENTES RENUNCIAS POR ENCONTRAR EL PARAÍSO PROMETIDO EN
EL CIELO Y EN LA TIERRA.
Si bien en el corazón humano
laten aspiraciones sobre una existencia feliz en la que no exista el dolor,
conforme vamos madurando y, en consecuencia, aceptando “LO QUE HAY”, comprendemos
que el dolor tiene sentido cuando éste es vivido desde la consciencia. Llega el
día en el que se disuelven las resistencias y la vida fluye como una auténtica
aventura de la consciencia.
El hecho de aceptar lo que
sucede, no es algo tan fácil como lo pueda ser la estéril resignación que nace
de la cabeza. Bien sabemos que la verdadera aceptación sólo es posible al
dejarnos encontrar por eso del corazón, tan inafectado y
estable que no se altera ante las contracciones de nuestra naturaleza periférica.
En realidad, en el camino
de regreso se desprenden las tentaciones de evitar lo que duele si eso
conlleva el evadir los deberes y responsabilidades. Y aunque la mente diseña
vivencias de alta cultura, no eludimos la “dosis urbana” de informática y
gestión que demanda la parte del juego que nos toca.
En el camino de vuelta se
sabe que nadie va a liberarnos de nuestras carencias y sus efectos de sombra
psicológica. No hay pareja que lo logre, no hay hijo que prometa, no hay
progenitor sabio ni cuenta bancaria que nos libere de LO QUE ESA INTELIGENCIA
DE VIDA SABE QUE NECESITAMOS ATRAVESAR PARA DESPERTAR LA CONCIENCIA.
Observamos que el anhelo de
lucidez y de mantener el corazón abierto a la bondad amorosa convive con las
miserias cotidianas de la naturaleza humana. Bien sabemos también que todo lo
que sucede es neutro, y que son nuestras íntimas interpretaciones de lo que
sucede, las que contraen o expanden la vulnerable dimensión del nivel persona.
EL TRABAJO DE “APRENDER A
VIVIR” ES VISTO Y COMPRENDIDO COMO UN ARTE, UN ARTE CUYO DOCTORADO ES OTORGADO,
NO SÓLO POR LOS AÑOS VIVIDOS, SINO POR LA ACCIÓN DEL MISTERIO Y LA GRACIA.
Se trata de una dimensión
incognoscible, o inteligencia transpersonal, que permite a las flores abrirse y
a las estrellas nacer o ser engullidas por un agujero negro que, sediento, se
las traga.
Conforme vamos regresando a
casa, algo en nosotros sabe de qué va realmente lo que estamos
viviendo. Comenzamos a reconocer como perfecto lo que hay, aunque a
nuestra mente y nuestro cuerpo, no le guste y se contraiga. Por fin amaneció
esa dimensión interna y estable que, al igual que un faro, se yergue arraigada
entre las olas de las tormentas; tal estabilidad es el fruto sereno de quien ha
atravesado aquellos primeros tiempos de visiones estrelladas y estados de
exaltación interna.
Cuando el alma emprende el
camino de regreso, bendice los tiempos pasados en los que deseó fervientemente
conquistar aquella intensa luz que se vislumbraba entre chispazos de profecía.
El camino de regreso es una senda que transcurre por el valle, una vía de
fertilidad que brota de la propia Humanidad plenamente manifestada. La
serenidad y la compasión bien entendida, abrazan toda forma de vida, sin la
carga de aversión y fascinación que precedió en los tiempos en que reinaban las
creencias.
Para conocer la flor, ya no
necesitamos poseerla y diseccionarla en los laboratorios de nuestra cognición
más avanzada. Aprendimos a sentir, a empatizar y a vivirnos desde un grado de
percepción en donde el vacío es plenitud, y la alegría sutil carece de
causa.
El alma, en su camino de regreso,
relativiza el “YO” con tanto esfuerzo construido. Sucede que los pensamientos
se han tornado detectables y mientras la mente piensa, la consciencia señala
que estos tan sólo son manojos de ideas. Pareciera que el ser
humano se asemeja a una antena por la que pasan múltiples frecuencias.
Sensaciones, emociones y pensamientos vienen y van en transitoriedad completa.
A todo esto, eso inmutable,
absoluto y no nacido, se revela digno y arraigado en el centro de la esencia.
Es entonces cuando nuestra vida atraviesa múltiples situaciones cargadas de
risas y lágrimas y, sin embargo, ninguna de estas dos emociones importa tanto
como para reprimir el llanto o apretar el rictus de esa primordial carcajada.
LA VIDA ES VIVIDA TAL CUAL
VIENE EN TODA SU PLENITUD; EL ALMA HA APRENDIDO A DISCERNIR ENTRE EL DOLOR Y EL
SUFRIMIENTO COMO SU LECCIÓN PRINCIPAL.
Por fin ella un día
comprendió que la resistencia, la dramatización y el enfado ante el dolor
aprisionaban la belleza. Se comprende con claridad que el dolor en sí mismo
forma parte del juego de nacer a la vida encarnada. Aquellos primeros dientes
que salían con llantinas, las distorsionantes hormonas de la adolescencia, las
primera traiciones, desconsuelos y la inevitable carrera de adquisiciones y
pérdidas. Todo un rosario de contracciones y expansiones que, conforme vienen,
se van, dejando frutos de maduración y capacidades insospechadas.
El ser humano, en el camino
de regreso aprende a no resistirse porque algo dentro de él mismo sabe
de qué va la cosa. Y cuando este dolor llega, proponiendo
desidentificaciones y desapegos, confía en su Inteligencia Transpersonal que
aporta sentido y visión unificada.
CON PROFUNDA HUMILDAD, SE
ATRAVIESAN LOS UMBRALES MÁS OSCUROS, PORQUE INCLUSO EN LA MÁXIMA OSCURIDAD, EL
EGO REVERBERA EN UNA TENUE LUMINOSIDAD QUE NUNCA SE APAGA.
EL ALMA COMPRENDE QUE LA
OSCURIDAD NO EXISTE, QUE ES TAN SÓLO AUSENCIA DE LUZ EN PLENA TRANSITORIEDAD, Y
QUE LAS ESTRELLAS NUNCA SE HAN APAGADO, AUNQUE HAYA NUBES EN EL CIELO QUE
OPAQUEN LA TRANSPARENCIA. ES ENTONCES CUANDO EL CORAZÓN REVELA LO SAGRADO QUE
CONSTITUYE NUESTRA ESENCIA, AUNQUE ESE CONSTRUCTO LLAMADO “YO” SE RESISTA EN
SUS EFÍMEROS CICLOS DE IDA Y VUELTA.