EL ARTE DE DEJAR IR

A LO LARGO DE NUESTRA DILATADA VIDA HAY OCASIONES QUE HAY QUE DEJAR IR Y EN ESE INSTANTE DEBEMOS TOMAR CONCIENCIA QUE ALGUNAS PERSONAS SON PARTE DE NUESTRA HISTORIA, NO DE NUESTRO DESTINO.

Eso no significa que no duela. Las despedidas siempre duelen, aun cuando hace tiempo que se ansíen. Esa es una de las leyes emocionales que rigen nuestra vida cuando interactuamos con los demás seres humanos.

De todas las personas que pasen por nuestra vida, muy pocas son las que se quedaran en ella para siempre, las demás cada una tendrán su tiempo unas más otras menos, pero no dudes que cada una de ellas cumplirá su cometido respecto a ti.

NADIE LLEGA A NUESTRAS VIDAS POR CASUALIDAD, SIEMPRE LLEGAN POR ALGO Y DESCUBRIR ESE ALGO POR EL QUE LLEGAN ES UNA DE LAS CLAVES DE LA FELICIDAD.

Hay personas o relaciones que dejan huella pero por más que luches, por más que intentes salvar, por más que se deba permanecer, simplemente, las relaciones se acaban o las personas se van. No es bonito decir adiós pero, a veces, sí es liberador y es en esa libertad donde reside la belleza y la necesidad.

Porque, a veces, tenemos esa necesidad de irnos para ser felices, de dejar atrás una vida llena de dolor y de inquietudes, de abandonar la incertidumbre emocional, de obtener nuestra paz interior y de ser los creadores de nuestra vida.

“ES MEJOR RETIRARSE Y DEJAR UN BONITO RECUERDO QUE INSISTIR. NO SE PIERDE LO QUE NO TUVISTE, NO SE MANTIENE LO QUE NO ES TUYO Y NO PUEDES AFERRARTE A ALGO QUE NO SE QUIERE QUEDAR”.

DECIR ADIÓS SIN DEJAR PALABRAS POR DECIR

Hay que saber decir adiós a las personas que dañan una parte de nosotros teniendo en cuenta que de todo, absolutamente de todo, podemos extraer una lección para futuras experiencias. Eso no quiere decir que, ese adiós no nos llene tristeza. Porque es importante querer y aprender de las relaciones que no pueden ser.

El mañana no lo tenemos asegurado nadie, seamos jóvenes o viejos. Hoy puede ser la última vez que veas a los que amas. Por eso no esperes más, hazlo hoy, ya que si el mañana nunca llega, seguramente lamentarás el día que no dedicaste tu tiempo para una sonrisa, un abrazo, un beso y estuviste muy ocupado para concederles momentos para compartir juntos.

Mantén a los que amas cerca de ti, diles al oído lo mucho que los necesitas, quiérelos y respétalos, toma tiempo para decirles “lo siento”, “perdóname”, “por favor”, “gracias” y todas las palabras de amor que conoces. Nadie te recordará por tus pensamientos secretos”.

CUANDO UN ADIÓS DUELA, REFLEXIONEMOS PROFUNDAMENTE. NO HAY NADA MÁS TRISTE QUE UN ADIÓS. PORQUE HASTA NUNCA ES HASTA NUNCA, PERO UN ADIÓS ES ¿HASTA CUÁNDO ES?

Duren lo que duren los amores, las amistades o cualquier otro tipo de relación, debe estar basado en la expresión de los sentimientos, emociones o pensamientos.

Es importante que no nos quedemos con la sensación de que no hemos dicho lo que sentíamos. Porque el adiós es más doloroso cuando en nuestro corazón quedaron muchas cosas por decir.

DEBEMOS TENER CONCIENCIA SIEMPRE DE QUE NUESTRO PASADO EMOCIONAL DETERMINARÁ NUESTRO PRESENTE. ASÍ QUE ES IMPORTANTE GESTIONAR NUESTROS SENTIMIENTOS, EMOCIONES Y PENSAMIENTOS, DE ACUERDO AL MOMENTO QUE NOS TOCA VIVIR. 

RECORDAD, UN ADIÓS DUELE, PERO LAS DESPEDIDAS MÁS DOLOROSAS SON LAS QUE NO SE PRONUNCIAN, LAS QUE DEJAN ASUNTOS PENDIENTES EN UN RINCÓN DEL ALMA QUE PUEDEN DAÑAR NUESTRO CORAZÓN.