miércoles, 2 de enero de 2013

EL REBELDE ES LA ÚNICA ESPERANZA PARA EL FUTURO DE LA HUMANIDAD.

"EL REBELDE VIVE LIBREMENTE SU VIDA, NO DEJA QUE NADIE DECIDIDA POR ÉL. EN LA VIDA SE GUÍA POR LOS DICTADOS DE SU INTUICIÓN, SU CONCIENCIA Y SU CORAZÓN”.
 
LA ESENCIA DE SU VIDA ES LA DE LA LIBERTAD Y PERMITE TAMBIÉN QUE TODO EL MUNDO VIVA EN LIBERTAD.
 
Hace de su vida un compromiso de mejorar él, para de esa forma mejorar la parcela de mundo que el ocupa, ayudando a que los demás hagan lo mismo.
 
Es solidario y comprometido con los que menos tienen, luchando por un reparto justo de la riqueza, siendo consciente de que no hay escasez de nada sino un reparto injusto de la riqueza que es de todos, es consciente también que si hay seres humanos que tienen poco o nada, es porque otros tienen más de lo que necesitan.
 
No permite que nadie interfiera en su vida, ni interfiere en la vida de nadie. Para él la vida es sagrada.
 
El rebelde es capaz de aceptar su imperfección, de relacionarse con ella con naturalidad y de generar procesos de cambio a partir de sus potencialidades, que lo lleven hacia delante en un proceso que entiende lógico y permanente.
 
No hay temores existenciales poderosos que lo aplasten o lo frenen. Se siente en un proceso evolutivo y desea participar de él con el mayor control posible. Diferencia la importancia relativa de la forma frente a la contundencia del fondo.
 
Sale de la alucinación del rito va hacia la luz de la razón. No le da miedo quedarse solo; al contrario, disfruta de su soledad como uno de sus más preciados tesoros...
 
El rebelde es aquel que vive siguiendo su propia luz, siguiendo a su propia conciencia. Crea su camino caminándolo, y entiende sus errores como lecciones para aprender y no sigue a la multitud en la superautopista de la vida, dirigida.
 
Su vida es peligrosa; pero una vida que no es peligrosa no es vida en absoluto.
 
Sólo responderá a las situaciones de acuerdo al conocimiento adquirido y a su escala de valores.
 
El rebelde ve a todos los seres humanos como iguales en idéntico proceso evolutivo aunque en estadios diferentes. Admite su status de Ser de Necesidades, que reconoce también en los demás.
 
El rebelde no es Hombre del rito ni de la forma, del dogma o el autoengaño y promueve a la sociedad  un ser que vive fuera del temor, frente a la eternidad, con la libertad en una mano, el deseo de evolución en la otra, con el Amor como meta y el compromiso solidario como consigna.
 
EL REBELDE EN FIN, ES UN CONJUNTO DE POTENCIALIDADES QUE SE VA CONCRETANDO A MEDIDA QUE LA CONCIENCIA MORAL DESARROLLADA, EL CONTROL DE SUS ACTOS ERRÓNEOS Y EL DESARROLLO DE SUS FUERZAS DE BIEN, VAN PRODUCIENDO LA TRANSFORMACIÓN MORAL QUE DEBE HACER RECONOCIBLE A UN REBELDE ANTE LOS DEMÁS, SABIENDO QUE LA MEJOR DE CAMBIAR ALGO ES…………DANDO EJEMPLO.

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